Me
voy a saltar una semana, pero es que lo necesito, todo lo que ella
me regala, todos los mimos que me proporciona.
Ya,
ya vendrá el momento en que vaya introduciendo esos capítulos que
me faltan, ¿Me faltan u os faltan? Poco a poco, pero de forma muy
suave, muy suave, de todo lo sucedido, en plan “remember”, como
en las pelis. Todo, todo ello esta en mi cabeza. La isla, ella …,
la isla. ¿Alguien se ha tragado las cinco temporadas de LOST? A mi
me está pasando lo mismo que a ellos, exactamente igual: un plan, un
viaje en avión, … bueno, no nos estrellamos, pero si tengo un
accidente al aterrizar y un par de meses antes. Yo con mis planes,
mis objetivos, mis neuras, mis enfermedades, … todo, todo muy
similar, … bueno me faltan “los otros”, … pero ya, ya,
aparecerán, seguro.
Pero,
¿por qué? ¿Por qué me atrajo esa serie? Cuando la empezaron a
emitir en la tele, me llamó la atención, el avión que se
estrellaba, los supervivientes, el cómo, y el porqué vinieron
después, pero el curre, las ocupaciones, las cosas de la vida, …
(¿-?), me hicieron olvidarme de los siguientes capítulos. Me los
perdí, no volví a acordarme de ello, hasta que a los pocos meses
antes de morir mi madre, cuando todo comenzaba a desmoronarse, su
cáncer, mi trabajo, mi vida, mi familia, mi mujer, mis ocupaciones,
tropecé con el primer capítulo que lo reponían en no se qué
cadena, recuerdo una noche en el pantano (la casa donde veraneábamos,
por cierto en el 2008, y mis padres estaban aquí, en Irlanda de
vacaciones con mi sobrino Juan).
¡¡
¡¡ Dios !! !!
Todo
encaja, todo estaba planificado. ¿Me estaré chalando? La música
celta, Enya, Loreena McKennit. Todo me estaba llamando, desde hace
años recibía señales, pero no sabía como interpretarlas. Vale,
estoy chalado, cambiaré el nombre del blog: “diario de un
madrileño chalado”. Pero feliz, o buscando la felicidad y con el
propósito de encontrarla. Ah ! y , ... si algo me molesta, fuera.
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